El a-commerce es un paso más en el mundo del comercio electrónico. El empleo de dispositivos inteligentes y nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, la realidad aumentada o el big data nos permiten automatizar la compra en el momento que nos surge la necesidad… o el deseo. Si aún no lo tienes claro, te traemos unos ejemplos.
El fracasado Dash Button de Amazon
El gigante del e-commerce no se podía quedar fuera de esta nueva manera de consumir. Para ello creó el Dash Button, un botón físico vinculado a una cuenta de Amazon que permitía comprar un producto –cada botón estaba programado para un artículo- de manera automática solo con pulsarlo. Considerado innecesario por muchos, desde el pasado febrero Amazon ha retirado este botón del mercado, superado por los asistentes de voz como Alexa o Echo.
Tu basura hace la compra por ti
El Dash Replenishment Service de Amazon continúa ofreciendo la posibilidad de automatizar las compras a través de dispositivos conectados como frigoríficos, cafeteras o lavadoras. Pero lo que más nos ha llamado la atención es GeniCan, un escáner conectado para el cubo de basura que detecta qué productos hemos tirado y realiza la compra por nosotros.
L’Oréal
Una de las principales marcas de cosmética del mundo apostó por la tecnología con la introducción de herramientas de realidad aumentada e inteligencia artificial vinculadas a aplicaciones que permiten la compra en tiempo real. Por ejemplo, una app que te recomienda productos basándose en los problemas que detecta en tus selfies y que permite comprarlos en ese mismo momento. Junto al asiático Watson lanzó #ColourMe, que permite probar virtualmente 300 productos de maquillaje y realizar su compra inmediata.
a-commerce para tus viajes
El sector turístico también se aprovecha de las ventajas de este sistema. Gracias a la startup Nixi1 podemos realizar la reserva de un vuelo o un hotel solo con dejar una nota de voz en un servicio de mensajería instantánea. La inteligencia artificial conecta con los buscadores y nos envía un enlace con las opciones disponibles. La aplicación Revolut te ofrece un seguro diario de viaje de manera automática cuando tu geolocalizador le indica que has salido del país.
Suscríbete y olvídate
Todos necesitamos reponer los calcetines. Blacksocks te ofrece la posibilidad de olvidarte para toda la vida de comprarlos con la opción “sosckscription”, en la que en tu primera compra decides el número y la periodicidad del envío. El mismo sistema de suscripción y envíos periódicos emplean la estadounidense Dollar Shave Club, que por un dólar te envía cuchillas de afeitar cada mes, y la mejicana Zoé Water, que te ofrece la posibilidad de crear un pedido de agua mineral que recibirás mensualmente en casa, evitando quedarte sin ella.
Comprar con una sonrisa
Y no nos referimos a que seas amable con el dependiente, porque no hay dependiente. Cuando la tecnología de a-commerce se traslada a los puntos de venta físicos permite que hagas tu compra sin pasar por caja, como sucede en el supermercado Amazon Go. El gigante chino Alibaba siguió su estela desarrollando la tecnología de reconocimiento facial. Primero lo probó en la cafetería pop-up Tao Café y después lo aplicó a los kioskos de pago de KFC con el innovador sistema “smile to pay”, en el que lo único que tienes que hacer para pagar tu pedido es sonreír.