Restaurantes sin comensales. Supermercados sin compradores. Tiendas sin clientes. Y aun así, espacios que generan ganancias. El aumento del comercio online ha supuesto el nacimiento de nuevos modelos de negocio basados en los preceptos de cerrar los espacios al público: las dark stores. Un concepto que consiste en la reconversión de tiendas en almacenes para satisfacer exclusivamente la demanda de pedidos digitales.
El alquiler de locales como delivery stations es un sistema dominado por el sector de la alimentación, concretamente por los restaurantes fantasmas. Os contamos de qué manera nació este modelo gracias a los pedidos de comida a domicilio, cómo se ha extendido a otros sectores y la integración de estos nuevos espacios en su entorno.
De las dark kitchens a las dark stores
Con el auge del delivery – comida para llevar y pedidos a domicilio – nacieron las dark kitchens, también conocidas como cocinas fantasmas. Son un modelo de negocio donde se alquilan locales para la elaboración de los pedidos de comida que se realizan a través de plataformas como Glovo, Deliveroo o Uber Eats. En contraposición a un restaurante, aquí desaparecen los camareros, las mesas y los comensales.
Durante la pandemia este modelo orientado a la venta online proliferó y se adaptó a otros sectores. Así es como llegarona a España las dark stores, tiendas reconvertidas en almacenes para dar salida de forma rápida y eficaz a los pedidos de alimentación y moda.
El sector retail se une a las dark stores
Las cadenas de supermercados británicas y estadounidenses fueron pioneras, hace una década, en abrir dark stores para mejor la eficiencia en la entrega de sus pedidos. El confinamiento mundial que se decretó a raíz de la pandemia de la covid-19 cerró todos los establecimientos. Esto impulsó a la industria de la moda a reinventarse e introducirse en este modelo, hasta el momento dominado por la alimentación.
Durante el confinamiento, Inditex abrió sus tiendas solamente a sus empleados para poder dar salida a los productos de ventas online. Blake Morgan, autora del libro The Customer Of The Future, escribió en Forbes que las dark stores son el futuro del comercio minorista.
Urbanismo y cambios en la última milla
Las dark stores están ubicadas en zonas urbanas o semiurbanas para evitar los altos precios de los alquileres en los centros de las ciudades. También aprovechan los espacios comerciales menos rentables para reconvertirlos. Estos nuevos almacenes necesitan una localización más céntrica que la de un centro de distribución logística tradicional, pero no tiene que tratarse de un bajo en la milla de oro de las ciudades.
El director de E-commerce de Dia, Diego Sebastián de Erice, explicó en La Vanguardia los aspectos principales de estos espacios: “Para el buen funcionamiento de una dark store es clave elegir tiendas grandes que tengan cerca otras donde poder derivar a los clientes físicos”. Además, también destaca que es “imprescindible” que estén bien comunicadas “para poder abarcar de forma rápida y eficiente grandes zonas de reparto”.
¿Cómo es la estética de estos lugares? Estos establecimientos no destacan por su arquitectura ni por su diseño. En su exterior no lucen marcas ni anuncios y su interior es similar al de un almacén. Arquitectura de marca blanca.
¿Cuáles son sus beneficios y contrapartidas? Una de las ventajas de las dark stores que resuelve uno de los problemas de logística de la última milla es que reduce las distancias de transporte y el impacto ambiental porque se trata de un centro de proximidad.
Dark stores y cuestiones legales
La reconversión de bajos comerciales en negocios “fantasma” supone una modificación en las licencias de los negocios, lo cual ha provocado ciertas divergencias en el barrio donde se ubican.
En @Madridiario:
Protesta contra las dark kitchen en Cibeles: "Hacen el ruido de un Boeing y hay carbonilla en las ventanas" https://t.co/aOp6P9I2h8— Stop Cocinas Fantasma Delicias (@4chimeneas) April 29, 2021
El aumento de las dark kitchens en zonas residenciales preocupa a las comunidades de propietarios. Por ello, los ayuntamientos de las grandes ciudades, como Madrid o Barcelona, han dejado de expedir licencias. El principal problema con el que se encuentran las cocinas fantasmas es que la normativa vigente exige que el local esté adecuado al uso de cocina industrial con una chimenea de extracción de humos con salida al exterior.
Los nuevos modelos de negocios necesitan que las leyes se adapten para poder llevar a cabo su actividad. El sector inmobiliario también se verá modificado con la proliferación de las dark stores. Y, aunque se vieron impulsadas por el confinamiento, las ventas online siguen aumentando.
Y tú, ¿crees que este modelo ha llegado para quedarse? Cuéntanoslo en redes sociales a través del hashtag #ConnectionsByFinsa.
