La horticultura urbana contribuye a crear ciudades más sostenibles y fomenta la autosuficiencia y el ahorro energético. Cultivar en los balcones, en las terrazas y en los pisos es una tendencia que ha llegado para quedarse por sus beneficios para la salud de las personas y de las ciudades. El sector tecnológico lo sabe y ha desarrollado dispositivos y aplicaciones para los huertos urbanos e inteligentes.
Los nuevos agricultores urbanitas no disponen de grandes terrenos ni de mucho tiempo para cuidar sus plantaciones. Por ello, las empresas tecnológicas trabajan para promover este estilo de vida. Las aplicaciones para identificar plagas, planificar cultivos o conocer las necesidades de riego de una planta ya están a disposición de todos los usuarios. El blog La Huertoteca recopila las mejores apps para los huertos urbanos.
La agencia de innovación y de diseño de interiores de Tom Dixon e IKEA están trabajando en el proyecto La jardinería salvará el mundo. Esta colaboración explora cómo se pueden aplicar los principios del diseño democrático a la agricultura urbana y el contraste entre lo hipernatural y lo hipertecnológico. La multinacional sueca quiere contribuir al movimiento de cultivar en los hogares y transmitir la belleza de la horticultura a través del conocimiento tradicional y las últimas innovaciones tecnológicas.
De las macetas inteligentes a los huertos verticales
El interior de tu piso u oficina también es un buen lugar para plantar. Bosch ha desarrollado SmartGrow, un huerto doméstico interior para cultivar a partir de cápsulas de semillas y que tiene integrado un sistema de riego e iluminación automatizado. En esta misma línea están las Smart Gardens de la empresa Click and Grown, jardines inteligentes que cuidan el riego, la luz y los nutrientes de forma automatizada.
Los huertos urbanos verticales permiten el cultivo sin tierra gracias a la técnica de la hidroponía y funcionan con un sistema de autorriego apoyado en el Internet de las Cosas. La empresa valenciana Optimus Garden ha creado unos huertos verticales completamente digitales. Mediante una aplicación tu huerto te avisa de cuándo debes llenar el depósito de agua y nutrientes y el propio huerto los dosifica. Esta innovación permite consumir plantas de kilómetro cero en las casas y en los restaurantes.
Granja vertical a gran escala
Siguiendo la tendencia de la agricultura vertical, realizada en espacios interiores con luz artificial y sin tierra, en Copenhague se está construyendo la granja vertical más grande de Europa. La empresa encargada del llevar a cabo este proyecto es la taiwanesa YesHealth. La compañía resalta que tiene la capacidad de recopilar una gran cantidad de datos alredor del mundo sobre diferentes entornos y condiciones en relación a la agricultura, así pueden optimizar los procesos de cremiento y mejorar la productividad.
Las ventajas de la agricultural vertical son la posibilidad de cultivar cualquier elemento en un entorno controlado. La granjas se pueden situar en zonas urbanas, más cerca de donde viven los consumidores, y así se reduce el tiempo, los gastos de transporte y la huella de carbono. La principal desventaja son los costes iniciales de la automatización y los procesos de riego.
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Los datos son la solución para llevar los cultivos hasta los lugares más áridos. AeroFarms, la empresa de tecnología agrícola más valorada en los últimos años, está llevando su modelo de granja vertical por todo el mundo. De hecho, su implementación ya ha llegado al desierto de Abu Dhabi.
Esta revolución verde proporciona a las urbes, a los hogares y a los lugares de trabajo, espacios verdes adicionales y promueve la sostenibilidad y la eficiencia. A las ciudades que no gozan del clima y las condiciones adecuadas para la agricultura tradicional les ofrece alimentos ecológicos y de kilómentro cero. Los huertos urbanos y las granjas verticales son los elementos de futuro para que las ciudades sean más sostenibles.
