Buscamos en el baúl de los recuerdos para que los grandes momentos vividos sean el motor de los nuevos espacios que habitaremos.
La incertidumbre reactiva esta nostalgia que nos lleva a tiempos mejores y a rememorar los espacios donde nos deleitábamos. Recordar momentos felices nos ayuda a evadirnos y a recuperar las buenas sensaciones.
Lo singular de cada espacio debe cobrar protagonismo. Se aprecia la unicidad como valor. Un estilo clásico actualizado, dorados y materiales nobles ayudarán a subrayar el carácter único de cada entorno.