“Hoy vamos a hacer historia”, dijo Steve Jobs en enero 2007 para presentar la última creación de su compañía, el iPhone. En su sede de Cupertino y con su habitual puesta en escena, Jobs se metió en el bolsillo al auditorio, que el 29 de junio hizo largas colas ante las Apple Store de EE.UU. para poder comprarlo.
10 años y 1 millón de iPhones vendidos después, los medios de comunicación, bloggers y frikis tecnológicos de todo el mundo se lanzaron a celebrarlo con reportajes sobre un terminal que, si nos encontrásemos hoy día sobre una mesa, no desentonaría con los actuales. En The Guardian es su reportero sobre tecnología Alex Hern quien cuenta como el iPhone que compró hace 10 años por la friolera de 500 dólares cambió su vida. Carmen Jané traza para El Periódico de Cataluña su evolución y la revolución que trajo asociada. Otros lanzan encuestas para saber cuál fue el primer iPhone que te compraste, cuál de las 10 generaciones que han pasado por el mercado en este tiempo te hizo caer en la tentación.
Poco nos imaginábamos esa combinación de diseño y tecnología iba a revolucionar de tal manera el mundo de los terminales móviles. Muchos de los avances que incorporan los smartphones actuales a los que no damos importancia tienen su origen en ese iPhone, como las pantallas táctiles. La base de su éxito fue, sin duda, su facilidad de uso. Sencillo e intuitivo, en un par de días el usuario se acostumbraba y ya no podía vivir sin él.
¿Recordáis el famoso anuncio de Apple para la Super Bowl de 1984, considerado uno de los mejores de la historia de la publicidad? Aquí os dejamos el anuncio original del iPhone, estrenado en la noche de los Oscars. Una estrella entre estrellas.