Los videojuegos, cada vez más asentados en la cultura actual, son parte indiscutible del imaginario de las últimas generaciones -fuesen más o menos gamers a título individual-. Analizamos el calado que ha dejado en sus 18 años de existencia Los Sims, el simulador de la vida real que permite desarrollar todo el potencial a la hora de construir espacios arquitectónicos
Construir una casa, elegir la disposición de las estancias, el color de las paredes, el tipo de mobiliario, el estilo… Relacionar Los Sims y la arquitectura no parece descabellado, y es que el videojuego multiplataforma que ha marcado a una generación cumple 18 años, y no solo permite simular el desarrollo vital y profesional de nuestro sim, también ofrece la posibilidad de construir sus viviendas y decorarlas con una interfaz que en cada nueva edición del juego gana mayor opción de personalización.
En los últimos años los videojuegos están siendo una industria relevante por su calidad gráfica, en la que se tienen muy en cuenta la cinemática y los espacios en los que transcurre la acción. Títulos como Grand Theft Auto, The last of us o Assasin’s Creed incorporaron en su equipo de desarrolladores a profesionales con una clara visión arquitectónica para lograr un efecto de inmersión total en la propuesta lúdica.
Secuencias de Grand Theft Auto y Assasin’s Creed
Los Sims y la arquitectura
Si vivir el entorno ayuda a sentir la narrativa en primera persona, algunos videojuegos como Los Sims facilitan la creación de mundos virtuales. Gracias a la irrupción de internet y la creciente especialización de los desarrolladores -unido al éxito que supuso desde su lanzamiento la franquicia de Los Sims– en cada nueva edición el modo de construcción de espacios para nuestros sims fue dotándose de mayores posibilidades, ofreciéndose en su última edición -la cuarta ya- plantillas y módulos descargables a través de una cuenta de usuario.
Electronic Arts, compañía dueña del título, fue consciente de la relación entre Los Sims y la arquitectura y quiso aprovechar las iniciativas de personas que, a título individual, compartían los espacios ideados, primeramente, incluyendo un repositorio digital donde hacer una comunidad de recursos. En los últimos años, la masificación de las redes sociales trajo consigo, entre otros, a un YouTuber que reprodujo la Casa Blanca o el hogar de Los Simpson, y la propia EA potencia que los usuarios difundan sus creaciones arquitectónicas mediante el hashtag #showusyourbuilds, todo un ejemplo de inspiración a golpe de clic.
Y vosotros, ¿habéis jugado a Los Sims? ¿Despertó vuestra vocación? E incluso nos atrevemos a preguntar… ¿será vuestro nuevo marco de inspiración?