Ya sabemos que la madera es un material noble que embellece y proporciona calidez a cualquier objeto, pero estas tres creaciones adquieren un plus con la materia prima de ciertos árboles:

Violín Stradivarius

 Esta legendaria marca no necesita presentación. Lo que hace que este violín sea considerado el mejor del mundo es la calidad de su madera. Desde el siglo XVII, la majestuosa sinfonía de sus instrumentos se consigue gracias al arce bosnio envejecido, madera preferente en la fabricación de los violines más sofisticados. El árbol se puede encontrar en diversas regiones del sur de Europa, aunque una de las más extensas es el monte Konjuh, en el noreste de Bosnia y Herzegovina.

Altavoces de madera Grovemade

Puesto que en los altavoces siempre se busca un sonido impecable, aún mejor es sí, además, ofrecen belleza. En este caso, se trata de un producto elaborado con madera de nogal y arce, que permiten un sonido de calidad y una buena resistencia. Su precio oscila entre los 500 y 600 dólares. Este sistema fue diseñado en colaboración con el diseñador Joey Roth, conocido por sus ideas de altavoces diferentes, entre ellas, un conjunto único de altavoces de cerámica.

Ajedrez J. Grahl

Además de por su precio de más de 650.000€, este ajedrez destaca por los materiales de lujo con los que está elaborado. El tablero, de madera de cerezo y ébano, está elaborado a mano y tiene incrustaciones de plata de primera ley. Fue diseñado en 1972 por Jim Grahl para la familia Cole. Es uno de los juegos más pesados del mundo, puesto que las figuras pesan casi 500 gramos. Los materiales de las piezas son oro macizo de catorce quilates y plata.