«Con suerte, en el futuro, preguntar si una empresa está construyendo un metaverso sonará tan ridículo como preguntarle cómo va su servicio de internet». Así define Marck Zuckerberg, presidente de Meta (anteriormente conocida como Facebook), la importancia que acabará teniendo la conceptualización de metaversos, mundos digitales totalmente inmersivos.

Durante muchos años internet se ha representado en dos dimensiones. La progresión que le espera nos lleva directamente a poder navegar en 3D, viviéndolo como si estuviésemos físicamente en una realidad paralela gracias al uso de distintos sensores y dispositivos. Esta revolución a través del metaverso cambiará la forma en la que compramos, trabajamos y, en definitiva, vivimos.

 

El metaverso, de cero a uno

Este concepto nació dentro de un libro de ciencia ficción de los años noventa para designar un mundo virtual distópico al que las personas escapaban de la realidad (sí, un argumento muy similar a la saga de películas Matrix). Desde ese momento, el metaverso se ha desarrollado de varias formas; en este post puedes ver cinco ejemplos paradigmáticos desde los inicios al momento presente.

¿Qué es necesario para experimentar -o crear- un metaverso? Los siguientes cinco elementos:

• Internet.
• Estándares abiertos de ficheros (texto, vídeo, imágenes…).
• Lenguajes de programación.
• Dispositivos de realidad extendida (gafas inteligentes, guantes hápticos…).
• Plataformas de contratos inteligentes (blockchain) que permitan realizar transacciones (como las criptomonedas).

El gran salto exponencial se produjo, como te adelantábamos, gracias a Meta. Precisamente, Facebook renombró su marca matriz de esta manera para manifestar su clara apuesta por el metaverso. La empresa ya había manifestado este interés cuando adquirió la firma de fabricación de gafas de realidad virtual Oculus VR en el año 2014. En aquel momento Meta mencionaba que potenciaría la creación de “la plataforma del mañana” y que cambiaría la forma de trabajar, jugar y comunicarnos. El afán actual se expande a mucho más que entretenimiento y entorno laboral.

 

De internet 2D a 3D: un metaverso de sensaciones

El metaverso nos permitirá experimentar mundos digitales con todos los sentidos. ¿Cómo se logrará esta inmersión total? Mediante el uso de dispositivos de realidad virtual y aumentada, tales como: guantes hápticos para el tacto, dispensadores de esencias, traductores simultáneos e interacción humana con máquinas digitales a través de real time speech translation y natural language processing.

Algunas marcas ya han desarrollado estos elementos. Por ejemplo, Microsoft Research y Ultraleap tienen kits de seguimiento corporal que responden a nuestros movimientos dentro del mundo virtual. Por su parte, Hypnos Virtual lanzó el dispensador Scentscape, capaz de reproducir millones de esencias diferentes.

 

Los futuros posibles del metaverso

Bloomberg Intelligente estima que el valor del metaverso en estos momentos es de 500 millones de dólares, y se calcula que en 2030 llegará a 2,5 billones. Estas cifras se refrendan con el anuncio de que Meta pondrá a 10.000 personas a trabajar en los próximos cinco años en este espacio figital que reproducirá el mundo real y al que podremos conectarnos globalmente.

Nike Clegg, vicepresidente de asuntos globales de Meta, asegura que el metaverso traerá nuevas oportunidades en el plano creativo, social y económico. Por ejemplo, con su plataforma Horizon Workrooms ya permite generar lugares de trabajo virtual donde encontrarse con colegas o clientes. Y no es la única empresa que desarrolla estos adelantos. Nvidia está preparando un espacio digital donde se probarán entornos industriales antes de construiros, con la finalidad de detectar errores y mejoras.

Al igual que las redes sociales abrieron nuevos canales de mercado e incluso despegaron roles profesionales dedicados en exclusiva, puede que acabemos viendo puestos para desempeñar la estrategia en el metaverso. Como muestra clara de ello, marcas como Balenciaga ya han incorporado el entorno digital a su estrategia y los NFTs comienzan a ser tendencia asentada en el sector del lujo.

 

El metaverso, la arquitectura y el interiorismo

¿Cómo podemos aprovechar las posibilidades del metaverso dentro de la arquitectura y el interiorismo? La primera deriva se encuentra en generar contenido para mundos virtuales como Decentraland o trabajar como paisajistas para plataformas similares al juego Minecraft. En fin último, el objetivo es más ambicioso, pues se podría llegar a escalar los procesos de una profesión tan esclava de la unicidad. ¿Te imaginas escalar tus diseños e incluso llegar a automatizarlos a partir de un patrón? El metaverso puede suponer un salto cualitativo en el sector.

 

La cara B del metaverso

El metaverso nace como un entorno no regulado e, inicialmente, impulsado por una empresa poderosa (Meta) puesta en entredicho por recientes malas prácticas vinculadas a sobreexposición publicitaria y potenciación de adicciones digitales. A este respecto, Nick Cregg recalcó que “ninguna empresa será propietaria en solitario del metaverso. Como internet, el metaverso se caracterizará por la apertura y la interoperabilidad”.

En relación con estas declaraciones que pretenden evitar la creación de un monopolio con demasiado poder, el CEO de Epic, Tim Sweeney, enfatizó que el metaverso “no proviene de ningún gigante de la industria, sino de la cristalización de la cocreación de millones de personas. Todos hacen lo suyo para el metaverso a través de la creación de contenido, la programación y el diseño de juegos. Las contribuciones también pueden agregar valor al metaverso de otras maneras». Esperemos que el metaverso realmente nos sirva de conexión con personas, ideas y nuevas formas de ver nuestra profesión.

 

¿Crees que el metaverso traerá avances para la arquitectura y el interiorismo? ¿Nos acabaremos manejando con NFTs? Cuéntanoslo en redes sociales a través del hashtag #ConnectionsByFinsa.