Arquitectura realizada con bateas, contenedores de mercancías, botellas de plástico… Frente al reciclaje tradicional, materiales que iban a ser desechos disfrutan de una segunda vida al ser reutilizados en proyectos arquitectónicos. ¿Tiene límites el reciclaje?
La Dezanove House está hecha con bateas. Sí, de esas donde crecen los mejillones de las rías gallegas. Iñaki Leite (Boiro, 1972) apostó por la madera de las bateas para un proyecto personal en A Pobra do Caramiñal. Una casa y varios premios después, parece que su idea pionera fue bien recibida. Este arquitecto gallego se centra ahora en proyectos de carácter residencial desde su estudio londinense. Atrás quedan cinco intensos años de trabajo y aprendizaje en el proyecto arquitectónico de la Ciudad de la Cultura, junto a Carlos Seoane y Peter Einsenman.
Madera de bateas para una vivienda en las rías gallegas
“El proyecto de la casa Dezanove empezó en el año 2010, el comienzo de la obra se retrasó y empecé a experimentar con la madera de batea en otro proyecto”, pero aclara que la idea de utilizar madera de batea nació con el proyecto de Dezanove “porque está en la Ría de Arousa y porque yo soy de Boiro. Quería utilizar un material auténtico y propio de la zona que, además de ayudar mucho cromáticamente a la integración con el entorno de los bosques del Barbanza, sobre todo lo que yo pretendía era integrarlo culturalmente”. Para ello apostó por las bateas, muy vinculadas a la Ría de Arousa, que también le sirvieron de inspiración. Concretamente, los cajones de madera de batea en los que se guardaban las herramientas de trabajo. “A raíz de la imagen de los cajones de batea varados en la playa surgió el proyecto de la casa de A Pobra, que no es otra cosa que una caja que está flotando y que tiene una ventana que es el salón”.
Iñaki hace tres usos diferentes de la madera en su proyecto. “En la parte exterior protege la vivienda, y para ello presenta su parte más rugosa”, nos explica, mientras que “en el interior la madera se presenta por la cara de corte, que es una cara más amable. Además la utilizo para enmarcar la ventana del salón, que ofrece la vista de la ría, y tienes un perfecto cuadro perimetral que te ‘transporta’ mucho más dentro de la ría”. Por último, se emplea en diseño del mobiliario del comedor, un diseño sencillo y exclusivo para este proyecto que formó parte de la exposición “Da árbore á cadeira” del Museo Gaiás.
Para este proyecto, Iñaki Leite visitó en varias ocasiones un astillero que fabrica bateas en la zona de Boiro para conseguir la madera, pero también se interesó por el proyecto de diseño y de construcción de las bateas y “en base a ello he intentado diseñar los detalles de la madera para que reflejasen esa tradición local del uso de la madera. La construcción de las contraventanas, por ejemplo, tiene mucho que ver con esto”. A esto se suma su interés por crear arquitecturas de bajo mantenimiento y un punto a favor de la madera de reciclaje es que no es necesario tratarla, envejece dignamente.
“Me interesa el uso inteligente de los materiales”
Este empleo de material se podría enmarcar en la creciente tendencia a la reutilización de materiales en arquitectura. “Para mí tiene mucho interés poder darle una segunda vida, una segunda oportunidad, a un material. Por otro lado, a todos nos gusta destacarnos del resto y dar con algo novedoso. Me interesa el uso inteligente de los materiales, utilizarlos de manera diferente. He visto proyectos de arquitectura de reciclaje muy interesantes que despiertan mucho la curiosidad y eso es lo más bonito del diseño, despertar la curiosidad de las personas”, señala Iñaki, que siempre busca “otro material que dé un sentido muy rotundo a un proyecto, pero eso es muy complicado. No solamente por encontrar el material y el proyecto, sino también por encontrar el cliente que te lo permita”.
Dezanove House tuvo una repercusión importante, sobre todo a partir de la publicación del proyecto en Designboom, donde fue la quinta obra más visitada en 2013. Actualmente ya existen en Galicia otros proyectos que emplean el mismo material, como las Cabañas de Broña de Salgado e Liñares o el restaurante Benboa de Corrubedo. Para Iñaki Leite la aparición de arquitecturas similares y el incremento del uso de la madera le reafirma en su apuesta. Un triunfo, el de la madera, que considera muy vinculada a la arquitectura ecológica, “al utilizar materiales que consumen poca energía y que se pueden trabajar con los recursos locales, como carpinteros de la zona”.
“Cuando yo terminé arquitectura, en el año 2000, en la escuela ya se hablaba de eficiencia energética. 17 años después las cosas han evolucionado y creo que está en la mente de todo arquitecto el utilizar los recursos técnicos que están a nuestro alcance para lograr un mejor consumo y ser más eficientes energéticamente, tanto en aislamientos como en la repercusión en la atmósfera.” Y es que a pesar de que el proyecto se ha difundido internacionalmente por su uso de la madera, de lo que más satisfecho se siente Leite es de su eficiencia energética, basada en un novedoso sistema de ventilación, híbrido de varios sistemas en uno, muy artesanal. La madera de reciclaje también tuvo que ver en esta eficiencia energética. “Y el propio diseño de la casa, con las contraventanas que protegen en verano, que se abren en invierno para aprovechar el sol, también tiene que ver”.
De la reutilización al reciclaje de materiales: una segunda vida
Iñaki Leite no está solo, ya que la reutilización de materiales es una tendencia creciente en la arquitectura. Un ejemplo destacado es el trabajo de la arquitecta española Izaskun Chinchilla, gran defensora del reciclaje de materiales pero también de la reutilización de objetos cotidianos de una manera diferente. Un ejemplo son los biombos del espacio VIP de ARCOmadrid 2016, creados con escaleras de mano y ventanas recicladas. O el pabellón Organic Growth levantado en 2015 en Central Park con paraguas, taburetes, trípodes fotográficos y ruedas de bicicletas.
También encontramos diversos ejemplos de construcciones empleando contenedores de barcos, y proyectos que buscan la manera de reutilizar plásticos, uno de los residuos que la humanidad produce en mayor cantidad. Así surgen ideas como el reciclaje de botellas de plástico para construir calles; EcoArk, un edificio de exposiciones construido en Taiwán cuya ‘piel’ está formada por 1,5 millones de botellas de plástico recicladas; o Replast, un bloque creado con plástico reciclado para la construcción de muros y barreras de contención. El caucho reciclado de neumáticos se emplea desde hace tiempo para crear el pavimento de los parques infantiles.
Michel Reynolds, “El guerrero de la basura”, vincula el reciclaje de materiales con la ecología construyendo casas completamente autosuficientes conocidas como earthships, donde todos los materiales utilizados en su construcción son reciclados: lastas de refresco, botellas de plástico o vidrio, neumáticos…
Upcycle House sería el resumen perfecto de la filosofía de la reutilización. Dos contenedores de mercancías forman la estructura principal, mientras techo y fachada se han realizado con láminas de aluminio obtenido del reciclaje de latas de refrescos. Los paneles de madera de paredes y techos están elaborados con serrín y astillas sobrantes de plantas madereras, mientras que los suelos de cocina y baño son de aglomerado creado aprovechando vidrio usado y corchos de botellas. Pero, a diferencia de las earthships, la casa no ofrece el aspecto de ‘reciclada’, sino que parece una vivienda contemporánea construida con materiales convencionales. ¿Quién da más?