El turismo masivo, con sus rutas prediseñadas y su afán de estandarización, está dejando paso a una nueva forma de viajar: un turismo más transformador y consciente. A veces por necesidad (las ciudades masificadas ofrecen alojamientos cada vez más caros) y otras por decisión (huir del tumulto y las colas), este enfoque está en auge de diversas formas. Y una de ellas es el denominado Turismo Dupe.
Dupe es un término procedente del inglés que quiere decir “duplicado”. No suena muy bien de primeras y suele usarse para denominar productos homólogos a otros más caros pero con buena relación calidad-precio. Sin embargo, aplicado al turismo, el término Dupe ejemplifica un cambio de tendencia que puede ser muy profundo.
Cada vez más personas buscan destinos alternativos a ciudades y puntos masificados, lo que ha abierto el abanico para que ciudades y zonas con menor afluencia turística reciban visitantes. Y lo mejor, de fondo, es que quienes buscan realizar esta forma de turismo huye de la masificación y, por lo tanto, puede evitar que se replique.
El objetivo de fondo: experiencias auténticas que conecten a quien viaja con los lugares que visitan, promoviendo una interacción genuina y respetuosa con las comunidades locales.
3 destinos a los que están llegando quienes viajan con consciencia
Gdansk, Polonia
Esta ciudad portuaria en el Mar Báltico combina historia, arquitectura y una vibrante vida cultural. Gdansk ha sabido conservar su autenticidad al evitar convertirse en un destino masificado como otras urbes europeas. Sus calles empedradas y sus mercados locales permiten una inmersión auténtica en la vida polaca.
Apulia, Italia
Situada en el sur de Italia, Apulia es una región que sorprende con sus casas tradicionales de «trulli», playas vírgenes y gastronomía única. Este destino se está posicionando como una alternativa tranquila a la saturada Costa Amalfitana, ofreciendo una experiencia menos concurrida y más genuina.
Amberes, Bélgica
Conocida por su rica tradición artística y su conexión como punto de intercambio comercial, Amberes es un destino que combina lo clásico con lo contemporáneo. Su enfoque en el diseño, la moda y la gastronomía la convierte en un lugar perfecto para los viajeros que buscan experiencias culturales y creativas sin las aglomeraciones de Bruselas o Brujas.
3 alojamientos para practicar un turismo Dupe
SUITESNATURE: Diseño y naturaleza en equilibrio
Este proyecto en Galicia es un ejemplo paradigmático de cómo el diseño puede integrarse con armonía en el entorno natural.
Además de su arquitectura respetuosa, SUITESNATURE colabora con comunidades locales, promoviendo actividades culturales y gastronómicas que benefician a la economía del lugar y enriquecen la experiencia del visitante.
Werk, Eslovaquia: un espacio que se adapta al día
Situado en un antiguo complejo industrial, Werk reinventa el uso del espacio para atender tanto a locales como a turistas. Por las mañanas, el lugar funciona como una cafetería y espacio de trabajo, mientras que por las noches se transforma en un bar con música en directo.
Hotel Terra Bonansa: el Pirineo fuera de la temporada de esquí
Este pequeño hotel boutique en el pirineo aragonés está construido con criterios de sostenibilidad, utilizando materiales locales y energías renovables. Situado en Bonansa, un pequeño pueblo de apenas 90 habitantes censados, alejado de otros valles del Pirineo que tienden a llenar sus alojamientos durante la época de esquí.
El turismo consciente a través de estos destinos y establecimientos nos da la oportunidad de redescubrir el mundo de una manera más pausada, permitiendo que tanto turistas como las comunidades anfitrionas se beneficien mutuamente. Eso sí, este modelo requiere un compromiso tanto de los proveedores de servicios como de turistas para mantener su autenticidad y singularidad, sin volver a caer en la trampa del turismo masificado.