Las ventanas dotan de mucho más que luminosidad a cualquier hábitat. Según los materiales que empleemos, transmiten distintas sensaciones y sirven de refuerzo para mejorar aspectos como la calidad del aire o la temperatura interior.
Hasta la fecha, el 70% de ventanas se estaban fabricando en metal, pero soluciones como las maderas macizas y mixtas vienen a ofrecer una propuesta que subraye la sostenibilidad y el bienestar. Analizamos esta y otras cuestiones para que elijas el modelo más adecuado para tus proyectos.
¿Cuáles son las tendencias en ventanas?
Como ocurre con otros elementos del interiorismo, el aspecto natural, ecológico y cálido es una de las tendencias más buscadas, según destaca ASOMA (Asociación Española de Fabricantes de ventanas de madera).
Desde Connections by Finsa también notamos un auge en la popularidad de la disposición de piso a techo. En este contexto, las ventanas de madera se presentan como una opción elegante y versátil. Estas majestuosas aberturas permiten que la luz inunde los ambientes, creando una sensación de amplitud y conexión con la naturaleza que rodea el hábitat.
Los acabados naturales y sutiles son esenciales para resaltar la belleza de la madera. Los tonos suaves y cálidos de roble, nogal o pino dan un toque terroso y acogedor a los espacios. Además, la utilización de tintes y barnices ecológicos realza la durabilidad y sostenibilidad de este material, reflejando el compromiso con el medio ambiente y la responsabilidad ecológica.
En cuanto a las calidades técnicas, desde ASOMA subrayan dos aspectos relacionados con la estanqueidad: el aislamiento térmico, por el ahorro económico implícito, y el acústico, con el objetivo de mejorar el confort dentro de las viviendas.
Como te comentábamos, la sostenibilidad es otro de los factores relevantes en la elección de ventanas, especialmente en lo que tiene que ver con el uso de los materiales. La madera, por sus cualidades de rendimiento, durabilidad y circularidad, se sitúa como un producto a tener en cuenta, lo que se refleja en el aumento en la demanda de cerramientos.
Nuevos materiales en ventanas
“Cada material tiene su hueco, y cada uno está destinado a un tipo diferente de cliente, pues cada persona busca determinadas propiedades u objetivos (precio, calidad, rendimiento…). En función de estos factores, será más adecuada una elección u otra, pero no existe una solución única y definitiva”, concluyen desde ASOMA.
Los nuevos materiales que se aprecian en los perfiles de ventanas obedecen a criterios de circularidad, rendimiento y estética, y en estas tres cualidades las innovaciones en madera encuentran un nicho premium: “quien elige madera para sus cerramientos está optando por la opción más premium en durabilidad, aislamiento, calidad y cualidades decorativas”, explican en la asociación de fabricantes.
Actualmente se está experimentando con productos que combinen madera sólida y madera técnica. Ejemplo de esta tendencia es Infinite Tricoya, un tablero de fibras de madera de extraordinaria estabilidad y durabilidad que permite fabricar un perfil mixto de madera laminada para lacar o pintar. Con ello se logra solventar la principal desventaja de las ventanas de madera: su mantenimiento.
Ventanas inteligentes
El avance tecnológico no ha dejado atrás a las ventanas de madera. Ya se pueden encontrar ventanas inteligentes que se integran con sistemas de automatización del hogar, permitiendo el control de la luz y la ventilación con tan solo un toque en un dispositivo móvil. Además, con doble o triple acristalamiento mejoran la eficiencia energética, manteniendo el interior fresco en verano y cálido en invierno.
Un paso más allá en materia de optimización es la solución Gradpanel Thermopine, consistente en un producto de control solar con lamas de madera de pino termotratada. Esta fachada sostenible funciona como una segunda piel del edificio y se puede establecer con un sistema de lamas fijas y orientables con las que regular el nivel lumínico del interior, aumentando el confort visual y térmico. Los estudios tras su aplicación arrojan que se consigue un 10% de ahorro energético en calefacción y hasta un 40% en refrigeración.
Ventajas y desventajas de las ventanas de madera
Optar por la madera como material para fabricar ventanas repercute en tres beneficios principales:
- Mejora de la calidad del aire: además de absorber y neutralizar sustancias tóxicas y olores, la madera es fuente natural de humidificación de interiores.
- Reducción de síntomas de asma y alergias: son una opción hipoalergénica al no acumular polvo ni ácaros.
- Potenciación del bienestar y la salud mental: su apariencia natural y cálida proporcionan sensaciones de calma y tranquilidad.
Entre sus desventajas, en estos momentos el precio inicial y sus costes de mantenimiento son las barreras que se suele encontrar este material respecto a otros.
Visto este repaso a las tendencias, materiales, ventajas y desventajas de las ventanas en madera, cuéntanos: ¿ya las has empleado en tus proyectos? Comparte tus impresiones en redes sociales usando el hashtag #ConnectionsByFinsa y conecta con nuevos estilos y profesionales de arquitectura e interiorismo.
